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Función de las vías aéreas

 

  • Tráquea, broncos y bronquiolos : Permiten el paso del aire hacia los pulmones sin interrupción. Su colapso se evita gracias a que mantienen una rigidez razonable que permite un movimiento suficiente para la expansión pulmonar. Su rigidez se da por: 

  1. Estructura cartilaginosa: 5/6 de la tráquea y gran parte de los bronquios.
  2. Músculo liso: cubre las partes de la tráquea y bronquios que no poseen estructura cartilaginosa y todos los bronquiolos a excepción del último que es bronquiolo pulmonar formado por epitelio pulmonar.

  • La resistencia máxima al flujo aéreo la ofrecen los bronquios de mayor tamaño y no los pequeños bronquios terminales, ya que hay mayor cantidad de bronquiolos y bronquios terminales por donde el flujo de aire es diminuto.
  • Control nervioso de la musculatura bronquial: El control está dado hacia el árbol bronquial y no directamente hacia los bronquiolos, ya que las fibras nerviosas no llegan en gran cantidad(SNS)

SNS: mediante la acción de la noradrenalina y la adrenalina ( esta principalmente) mediante el receptor b-adrenérgico estimulan a los receptores beta-adrenérgicos y dilatan el árbol bronquial. 

SNS: algunas fibras vagales penetran en el parénquima pulmonar, estimulando la constricción de los bronquiolos por la liberación de acetilcolina. 

El moco secretado por las células caliciformes y glándulas submucosas lubrican las vías respiratorias y atrapan partículas inspiradas y por acción de los cilios son arrastrados hacia arriba(cilios pulmonares) o hacia abajo(cilios nasales) en dirección a la faringe para ser deglutidos o expectorados. 

Reflejo tusígeno: los bronquios, la tráquea, los alveolos y los bronquiolos son sensibles a sustancias extrañas, irritantes y corrosivos como gases o cloro. El estímulo que genera irritación es llevado por aferencias vagales hacia el bulbo raquídeo en donde se envían eferencias para:

  1. Inspiración de 2,5 l de aire.
  2. Cierre de la epiglotis y cuerdas vocales.
  3. Contracción de los músculos abdominales e intercostales internos para que muevan el diafragma hacia arriba y aumente la presión intrapulmonar.
  4. Apertura de las cuerdas vocales y epiglotis.
  5. La presión genera que se expulse con fuerza el contenido de aire atrapado. Para eliminar la sustancia extraña.

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